Muchas veces hemos escuchado sobre los estilos Luis XIV, Luis XV y Luis XVI en decoración, pero a menudo es difícil diferenciarlos. Para hacerlo correctamente, es necesario analizar las formas, materiales y colores. En este artículo encontrarás la claves principales para ayudarte a identificar cada estilo ¿Quieres adentrarte en la decoración histórica?
El estilo Luis XIV
El Estilo Luis XIV surgió durante el reinado de Luis XIV de Francia, llamado "El Rey Sol" (1638-1715). Hubo apoyo a las artes, incluyendo literatura, música, pintura y arquitectura. Destacó la construcción de Palacio de Versalles, obra maestra de arquitectura.
En el mobiliario, hubo dos tipos: "de aparato," con detalles dorados, y "burgueses," en madera maciza. La simetría y dimensiones imponentes eran comunes. Influencias italianas y antiguas se notaban en los diseños. La marquetería, especialmente la de Boulle, destacó con materiales como la "écaille de tortue," latón, esmalte y marfil.
El estilo combinó barroco y clasicismo, expresando el poder monárquico. Alcanzó su cima bajo la dirección de artistas como Charles Le Brun y Colbert. Boulle dejó un legado en la ebanistería con su técnica de marquetería.
El estilo Luis XV
En este período, los muebles se vuelven más ostentosos que funcionales. Se abandona el estilo barroco en favor del rococó, que es mucho más recargado.
Las curvas predominan en las patas y brazos de los sillones, cómodas y recibidores. Aunque hay asimetría en las formas, esta suele ser apenas perceptible a simple vista, ya que los diseños cubren todo el mueble.
Los estilos incluyen motivos como conchas, caracolas, rocas, pájaros, ramos y escenas de amor.
La madera dorada es un gran protagonista de la época, a menudo decorada con marquetería hecha de nácar, conchas, marfil, cobre o estaño. Se utilizan bronces dorados, grabados y cincelados para adornar los muebles, y se permite una amplia gama de elementos decorativos.
Las maderas preferidas son el peral y el ébano, y se combinan con tapices de colores verde, azul, rosa, beige y dorado en tonos mate. En resumen, el estilo rococó se caracteriza por su profusa ornamentación y la incorporación de elementos elegantes y caprichosos.
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El estilo Luis XVI
Después del período de exceso y profusa ornamentación, el nuevo periodo que se desarrolló entre 1760 y 1790 se destaca por su sencillez y moderación, retornando al rigor de las formas geométricas, con énfasis en rectángulos, cuadrados y óvalos.
Los muebles adoptan un carácter más austero, sobrio y elegante en esta época. Este estilo, en parte, surgió como resultado de las excavaciones de las ciudades romanas de Pompeya y Herculano, y algunas de sus formas y motivos se inspiraron en las proporciones griegas y romanas, como las columnas dóricas y las máscaras griegas. La simetría y la línea recta volvieron a ser protagonistas en el diseño.
Los elementos decorativos se vuelven más austeros y simétricos. Los favoritos de la época incluyen lazos de cinta y cortinas festoneadas con toques de dorado en lugares estratégicos.
En contraste con épocas anteriores, los muebles son de menor tamaño y más fáciles de transportar. Un elemento característico de este estilo es la incorporación de junquillo en los muebles, que añaden un toque distintivo a la decoración.
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Con esta información verás que cada estilo refleja las influencias y los gustos de su tiempo, lo que los hace únicos y reconocibles en la decoración de interiores.
